La adolescencia suele ser un momento de búsqueda y experimentación. En esta etapa muchos jóvenes prueban sustancias (como tabaco, alcohol, psicofármacos, marihuana, cocaína, paco, LSD), sin que eso implique necesariamente que tengan un problema de adicción.
Si bien el consumo de sustancias puede generar situaciones de riesgo para la salud, es necesario diferenciar aquellos consumos que son problemáticos de los que no lo son. El consumo se torna problemático cuando atenta contra la salud y el proyecto de vida de los adolescentes.
Es fundamental que los padres y adultos estén abiertos y dispuestos a dialogar, no sólo acerca de los riesgos del consumo de sustancias, sino también sobre cualquier preocupación que los adolescentes tengan.
Hay 6 mitos:
- La mayoría de las personas que consumen o consumieron drogas no se vuelven adictas a ellas
- Esto no es así, muchas drogas legales como el alcohol, generan una mayor dependencia tanto física como psicológica
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